El objetivo es ayudar al deportista a regresar al nivel que presentaba antes de su lesión, cuidándolo al mismo tiempo.
El deporte implica superación y como tal una exigencia física para conseguir la victoria o mejorar nuestra marca. Buscar los límites de nuestra capacidad ocasiona un desgaste que puede repercutir en el rendimiento o en la salud del deportista. Con el quiromasaje favorecemos que la fatiga se reduzca rápidamente, prevenimos lesiones y si éstas se producen acelera la recuperación.
Hay cuatro pilares básicos para una readaptación al deporte, que son los siguientes:
Promoción de la salud
Es el proceso que permite a las personas incrementar el control sobre su salud y sus determinantes, y así mejorarla.
De forma que aconsejaremos a los pacientes a coger hábitos saludables, como en la nutrición o el ejercicio físico.
Prevención
Estar alerta para evitar, en la medida de lo posible, todos aquellos factores que pudieran causar una lesión durante la práctica deportiva, por una mala preparación física o por sobreuso, en las estructuras habituales de cada deporte y sus posibles recidivas.
Recuperación
Tratar las lesiones producidas, las lesiones asociadas y las recidivas que pudieran aparecer.
Procurar adaptar al deportista de su práctica deportiva en el mínimo tiempo posible, teniendo en cuenta siempre el ciclo natural de la lesión.
Readaptación final
Tras la fase de recuperación, pondremos todos los conocimientos para lograr que el deportista comience su práctica deportiva de manera progresiva, supervisada por un fisioterapeuta.